¿Quieren ver por favor la hora en la que estoy trabajando? xD ¡Yo no hago estos turnos! Sino los de 6 a 3, pero de la mañana. Gracias a Lan, hace mucho que no veía la luz de la mañana (o creo que jamás tuve un turno tan temprano) y aquí me tienen, con medio metro de ojeras y ganas de haberme quedado jugando Ragnarok hasta más tarde (si ya ni cuento hacía dormir =P).
El problema de venir tan temprano, más que toparme con el sol en su máxima expresión cuando salga de aquí, es que más tarde tendré un sueño terrible. Lo bueno, es que comeré en mi casita y me libraré por un fin de semana de la comida chatarra.
De lo que sí no voy a salvarme es del pelotón de humanos que habrá en el centro de Santiago como consecuencia del día de los enamorados. Y no es que tenga nada (bueno, no mucho) en contra de que la gente ande expresando su cariño por la vida, pero es que en tantos casos se ve todo tan falso! Esos besos de teleserie de los pendejos de no más de 15, que parece que se fueran a comer vivo entre ellos como si de sus lenguas dependiera el grado en que se demuestran amor; o los típicos pololos part-time que se ven tarde-mal-y-nunca y que para el 14 se acuerdan que tenían pierna pelada al lado y la sacan a dar una vuelta (se creerán perros o algo xD); o esos pasteles que creen que regalándoles todo el sueldo en rosas será más convincente su cariño. NO señores, me opongo a las fechas comerciales. El San Valentín es siempre o nunca! El amor no es por un rato, no es un hoy te quiero y mañana no, y después quizás. Cansa, de verdad que cansa ver como desperdician su tiempo en alguien con quién ni siquiera se proyectan para compartir una de las cosas más valorables de la vida en pareja: la reciprocidad.
Por cierto, tú... si, tú, a tu lado todos los días son especiales y espero que sea así por el resto de la eternidad. Amo te ^^!
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